La maquinaria que puede ser utilizada en la construcción o reparación de carreteras es muy variada y dentro del gran abanico de propuestas existentes se encuentra la maquinaria de compactación. Se suelen utilizar en compactación de plataformas y terraplenes y tienen características muy especiales.
Tipos de maquinaria de compactación
Aunque hay un gran número de tipos, vamos a centrarnos en algunos de los más utilizados, como por ejemplo los compactadores de pata de cabra. Están formados por rodillos cilíndricos huecos donde van montado pisones de sección prismática similar a la pata de una cabra. Se montan sobre un bastidor acoplado a un tractor para su remolque. En este modelo, la energía para la compactación se consigue gracias a la presión de contacto de una hilera de pisones, sobre la que se distribuye el peso total de la máquina. Otra clase de maquinaria de compactación es la de rodillos vibratorios, los cuales son usados normalmente en terrenos pedregosos, buscando asentar las piedras. La vibración de este tipo de dispositivos puede ser graduada para conseguir un mejor resultado a la hora de compactar. Los compactadores combinados se encuentran formados por un rodillo vibratorio montado en el eje delantero y en el eje trasero se encuentran unos neumáticos lisos (normalmente de cuatro a seis) con lo que se busca mejorar las condiciones de compactación. Finalizamos con los compactadores neumáticos, uno de los más efectivos que hay en la actualidad a la hora de construir carpetas asfálticas. Se caracterizan por contar con un número impar de llantas montadas en dos ejes. Las llantas están colocadas de tal manera que las traseras cubren los espacios de separación que hay entre las primeras. Aunque pueda parecer lo contrario, este sistema es muy efectivo dado que esta maquinaria tiene un peso que puede oscilar entre las 6 y las 24 toneladas.