A la hora de elegir la maquinaria adecuada, nos surgen dudas sobre cuál o cuáles son las más recomendadas y si son adecuadas para el trabajo que vamos a desempeñar. Para ello, hemos preparado nuestra Guía de compra para que el consumidor tome una decisión de compra adecuada y para que elija bien la maquinaria. Por ello, vamos a explicaros 10 factores para llevar a cabo la compra adecuada:
- Los requisitos de uso
Lo primero que debes hacer es una lista de especificaciones deseadas. Te damos algunos ejemplos según el tipo de máquina que estés buscando: Manipuladora de materiales: altura para apilar el material, producción de trabajo, tarea que realizar (cargar camiones, alimentar prensa-cizalla, alimentar trituradora, manipular material, etc.). Excavadora: tipo de trabajo (por producción, por requerimientos en la obra, tipos de suelos dónde se trabajará, por versatilidad…), profundidad y alcance de excavación, capacidad de carga, etc. Máquina para reciclar cables: tipo y composición de los cables, producción necesaria, clasificación requerida, pureza del material de salida, etc. Prensa-cizalla: producción por hora, dureza del material a cizallar, tamaño final de trituración, etc. Trituradora de materiales: tipos de materiales a triturar, producción requerida, que material queremos de salida, que uso le daremos al material de salida, granulometría del material, etc.
- La especialización de la máquina
Cuando un fabricante está especializado en un tipo de maquinaria, la calidad de la máquina es mayor porque conoce las especificidades del trabajo para el que se ha diseñado. En cambio, hay muchos fabricantes que han ampliado su oferta con modelos de maquinaria que solo son adaptaciones. Por ejemplo, cambiar un brazo de excavación por uno de elevación no es suficiente para crear una nueva máquina: se pierde en estabilidad, se reduce la producción y se aumenta el consumo y la probabilidad de averías.
- El lugar donde se manejará la máquina
La ubicación de la máquina y las condiciones de trabajo son factores igual de importantes para comparar sus características. La maquinaria para interior no trabaja en entornos similares a la exterior: el polvo o la refrigeración del local inciden tanto en el comportamiento diario como la climatología.
- La previsión de futuro
Una máquina debe dar respuesta a la situación actual de la empresa, pero también puede modificarse para tener en cuenta su posible crecimiento. Quizá haya mayores necesidades de producción que cubrir y entonces habría que contemplar una máquina modular que permite cambiar componentes para ampliar prestaciones.
- El coste de mantenimiento
Los fabricantes solo son responsables del 20-30% de los componentes de la máquina, el resto son de fábricas independientes. No obstante, algunos fabricantes tienen el ‘monopolio’ de esas piezas por lo que se está obligado a recurrir a ellos para cubrir cualquier reparación.
- Las referencias de personas que la estén usando
Como en cualquier otra compra, escuchar la opinión de personas que ya hayan comprado el producto es una buena manera de formarnos una opinión. Recomendaciones sobre su funcionamiento o críticas del rendimiento pueden ayudarnos a tomar la decisión correcta.
- Las ventas a nivel mundial, no solo el local
Cada mercado es diferente: en un territorio puede que haya una máquina muy vendida pero eso no significa que en nuestra zona vaya a ser la mejor. Tampoco que a un distribuidor le funcione muy bien es sinónimo de que es la que más te conviene.
- La atención local
El servicio de un concesionario “local” especializado es lo que marca la diferencia entre una gestión sencilla y un día o una semana perdidos porque un problema no se resuelve.
- El servicio postventa
Igual que en el diseño de la máquina, también la especialización influye en el buen mantenimiento: los mecánicos y los interlocutores tienen que conocer cada aparato. Una excavadora no es una grúa, se necesita formación específica para un buen servicio postventa.
- La solidez del distribuidor
El lugar donde se adquiere la máquina, es tan importante como la propia marca fabricante. Hay que contrastar la solvencia, la experiencia en el mercado, su especialización, los planes de mantenimiento que ofrece, los talleres móviles de que dispone, el tiempo de respuesta… Como has visto, hay muchos factores a tener en cuenta para decidir qué máquina escoger. También puedes fijarte en el precio, las condiciones de financiación o las ofertas que puedas encontrar. Pero te recomendamos que esto no sea el factor determinante: recuerda el punto 4 y piensa en el futuro.